¿Qué es el Juego de Castidad?
El juego de la castidad gira en torno a limitar el acceso a los genitales de alguien o la capacidad de tener un orgasmo, a menudo utilizando un dispositivo físico como una jaula, un cinturón o un candado. El corazón de esta práctica es el control y la anticipación: la pareja encerrada se mantiene excitada pero restringida, mientras que quien tiene la llave decide cuándo—y si—se permite algún alivio.
Las escenas pueden durar desde una sesión corta hasta períodos prolongados, dependiendo de la seguridad, la comodidad y el estilo de vida. Algunas parejas usan la castidad como una provocación juguetona, encerrándose por unas horas antes de una cita nocturna. Otras construyen estructuras de intercambio de poder a largo plazo donde el dispositivo se convierte en un símbolo de compromiso y control. La persona con la llave puede enviar mensajes sugestivos, provocar físicamente o establecer tareas y rituales que mantengan la atención de la pareja encerrada en ellos.
La higiene, el ajuste y la salud son vitales. Los dispositivos deben ser seguros para el cuerpo, de tamaño adecuado y retirados inmediatamente si aparecen dolor, hinchazón u otros problemas. La comunicación sobre la frecuencia de la retirada, qué tipo de estimulación está permitida y si los orgasmos pueden ocurrir con el dispositivo puesto establece expectativas claras. Cuando se realiza de manera responsable, el juego de la castidad se convierte en una experiencia de lenta combustión llena de deseo latente, confianza y la embriagadora conciencia de que alguien más literalmente tiene la llave de tu placer.
La actividad kink debe ser siempre estrictamente segura, sensata y consensuada, y debe utilizar una palabra de seguridad.
